Los mejores frutos de la tierra reciben su premio
La Rioja es un lugar privilegiado en muchos aspectos, y uno de los que puede presumir con más rotundidad es el valor de su sector agrario. Ganaderos y agricultores ofrecen los mejores frutos de la región con una labor vital para hacer de La Rioja una comunidad profundamente arraigada a su campo, desde la tierra hasta nuestro paladar. En reconocimiento a ello Diario LA RIOJA y Bankia impulsaron los I Premios del Campo, que anoche entregaron sus galardones a Ana María y Raquel Pérez, Daniel Leza, Ramiro Arnedo, Rubén Hortelano y Pera de Rincón.
La gala, celebrada en edificio CCT de la Universidad de La Rioja y conducida por Carlos Santamaría, fue un contenido pero más que significativo ejemplo de todas las pequeñas y grandes historias que construyen el campo riojano. Con emociones, vidas de sacrificio, frutos consolidados y referentes que no perder nunca de vista.
José Luis Prusén, director de Diario LA RIOJA, tomó en primer lugar la palabra para recalcar que los premios suponían «la expresión del vínculo de Diario LA RIOJA con nuestra comunidad y su sector agrario», así como la importancia de «una industria agroalimentaria vinculada a la calidad y por la cual La Rioja es reconocida en todo el mundo». Prusén se refirió además a esa tradición de la región que ha sido legada hasta hoy en día: «Muchos podemos presumir de ser hijos y nietos de agricultores. Formamos parte de una comunidad cuyos valores están unidos a la actividad agraria».
- «Tratamos que la innovación sea algo práctico»
- «Nuestro padre nos inculcó el amor por su proyecto»
- «Es un producto autóctono con técnicas modernas»
- «El valor añadido ofrece un futuro a nuestro campo»
- «Lo más gratificante es poder trabajar y ser feliz»
Julio Martín García, director corporativo territorial Norte de Bankia, explicó cómo surgieron los Premios del Campo: «En nuestra relación con Diario LA RIOJA se puso sobre la mesa la importancia del sector en la región y quisimos hacer algo más, tomar partido». Martín destacó además que el certamen «nace con vocación de permanencia para convertirlos en referencia».
Fueron cinco, más uno inesperado, los galardonados durante la noche, comenzando con la categoría ‘Mujer emprendedora’, que fue a parar a Ana María y Raquel Pérez Sáenz, responsables de Avícola Rioja. La granja de pollos, situada en Quel, integra los sistemas modernos, la búsqueda del bienestar animal y una calidad en la producción reconocida desde el comienzo de la andadura del proyecto.
Todas las categorías estuvieron muy disputadas, ya que es complejo elegir entre tantos buenos candidatos, y no fue menos la de ‘Mejor producto’, que fue finalmente a parar a uno de nuestros alimentos más internacionales, la pera de Rincón de Soto. Nuestra fruta por excelencia se ha situado en todos los hogares del país gracias al impulso de la Denominación de Origen Protegida, creada en el año 2002 y que desde entonces no ha dejado de crecer, de cerca de 350 hectáreas y 4 localidades a casi 1.000 hectáreas y 28 municipios hoy en día.
La incorporación de jóvenes agricultores y ganaderos al campo es algo fundamental para mantener la vitalidad agraria, por lo que la categoría de ‘Jóvenes agricultores’ era especialmente relevante. El galardón fue a parar a Daniel Leza, agricultor de Lardero que ha impulsado un proyecto de recuperación de la fresa autóctona del Iregua, combinando la búsqueda de un producto tradicional con las últimas tecnologías aplicadas al cultivo.
El reconocimiento más especial llegó en la categoría ‘Trayectoria profesional’, concedido a título póstumo a Ramiro Arnedo, fallecido en el mes de noviembre. Un galardón que servía para valorar la trayectoria emprendedora e incansable del fundador de la empresa de semillas de Calahorra que lleva nombre y que ahora dirigen sus hijos.
Finalmente, y muy ligado al anterior galardonado, Rubén Hortelano recibió el premio en la categoría ‘Innovación’ por su proyecto de invernadero situado en Logroño y en el que cultiva tomates, pimientos y otras hortalizas por el método hidropónico. El reflejo de cómo la calidad alimentaria y la eficiencia energética van de la mano gracias a las nuevas tecnologías.
La gala también contó con el reconocimiento al enólogo y colaborador de Diario LA RIOJA Manuel Ruiz Hernández, que destacó que «la divulgación es clave en el campo» y su «obsesión por la experimentación, que es añadir capítulos a algo que todavía no existe». Páginas por escribir en el libro de historia del campo riojano, que es pasado, presente y futuro.